México pedirá explicaciones a EE.UU. por incursión en playa de Tamaulipas 
Conibio Global A. C. aseguró que las estacas fueron colocadas “dentro de territorio mexicano, específicamente en la boca del Río Bravo”.
- Redacción AN / KC

Personal de la Secretaría de Marina retiró seis letreros de advertencia colocados en Playa Bagdad, en Matamoros, Tamaulipas; luego de que Conibio Global A.C. denunció que fueron instalados por personas procedentes de Estados Unidos dentro de territorio mexicano.
Las señales, que estaban clavadas en la arena y algunas incluso dentro del mar, advertían que el área era “restringida” y supuestamente perteneciente al Departamento de Defensa de Estados Unidos.
La Secretaría de Marina informó en un comunicado que “personal naval localizó y retiró, de manera preventiva, seis letreros de advertencia colocados en Playa Bagdad, Tamaulipas, cuya instalación generó dudas respecto a su procedencia y a su ubicación en el territorio nacional”.
La dependencia explicó que, tras las primeras verificaciones, “no se identificó confirmación de que los señalamientos hubieran sido colocados por alguna autoridad estadounidense”, de acuerdo con consultas realizadas por el Consulado de México en Brownsville.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) señaló que ya estableció comunicación con la Embajada de Estados Unidos en México para solicitar información sobre el incidente.
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Añadió que la sección mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas iniciará las revisiones técnicas previstas en los tratados bilaterales, con el fin de verificar mapas, instrumentos y delimitaciones oficiales en ese tramo fronterizo.
La Cancillería afirmó que “se realizarán las consultas técnicas necesarias para esclarecer cabalmente el incidente”.
El retiro de los señalamientos ocurrió horas después de que la organización ambiental Conibio Global A.C. denunció públicamente su colocación.
La agrupación informó que alrededor de las diez de la mañana, uno de sus técnicos observó “la presencia de un grupo de personas procedentes de Estados Unidos, quienes ingresaron a territorio mexicano a través del cruce del Río Bravo en una embarcación”.
Según su reporte, estas personas “procedieron a instalar varias estacas metálicas con señalamientos de ‘Área Restringida’, presuntamente pertenecientes al Departamento de Defensa de los Estados Unidos”.
“Esta propiedad del Departamento de Defensa ha sido declarada zona restringida por autoridad del comandante, de acuerdo con las disposiciones de la directiva emitida por el Secretario de Defensa, en virtud de la sección 21 de la Ley de Seguridad Interna de 1950. Se prohíbe la entrada no autorizada”, se lee en un letrero.
También incluían restricciones para tomar fotografías, hacer anotaciones o elaborar representaciones gráficas del área, y señalaban que “todo material de este tipo que se encuentre en posesión de personas no autorizadas será confiscado”.
Conibio Global aseguró que las estacas fueron colocadas “dentro de territorio mexicano, específicamente en la boca del Río Bravo”, y expresó preocupación por las implicaciones ambientales y jurisdiccionales que podría generar este tipo de actos.
La organización recordó que se trata de un espacio ecológicamente sensible en el que han documentado la presencia de manatíes, cocodrilos, tortugas marinas y aves migratorias y residentes, algunas catalogadas en riesgo o peligro de extinción.
También subrayó que el área es relevante para el seguimiento de fauna silvestre en el corredor costero del Golfo de México.
Tras el retiro de los señalamientos por parte de personal naval, Conibio Global difundió imágenes del operativo y reconoció “el trabajo del Ejército Nacional y la Secretaría de Marina”.
El Gobierno de México, a través de Marina y Relaciones Exteriores, afirmó que mantiene comunicación con las autoridades estadounidenses y con las instancias nacionales competentes para “garantizar la certidumbre jurídica en la frontera común”.
La presidenta Claudia Sheinbaum leyó este comunicado y reiteró que busca fortalecer la cooperación binacional mientras se esclarece el origen y propósito de los objetos colocados en Playa Bagdad.
En días pasados, la organización Conibio Global A.C. presentó una denuncia formal ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) por la incursión no autorizada de la plataforma estadounidense “L/B JILL” en aguas mexicanas, por lo que ambos casos podrían estar relacionados.
Además, por la extracción de desechos espaciales presuntamente asociados a la empresa SpaceX, de Elon Musk.
En el documento dirigido a la titular de la Profepa, Mariana Boy Tamborrell, la asociación señaló que desde 2024 ha registrado “la llegada de restos metálicos y plásticos que al parecer son compatibles con el sistema contra incendios interno o de propulsión del booster de cohetes Starship”.








